17.1.07

Mejor dicho imposible...

Desde que mi mente desvaría nunca desvarió tanto como lo hizo cuando oyó la frase: "dos monólogos no hacen un diálogo".

Y caigo en cuenta de que todo el mundo habla de su ombligo y no dialoga. Todos muy sumergidos en sus problemas, y nadie le da importancia a lo que le pasa a los demás... claaa... todos tienen sus problemas y nadie necesita escuchar los ajenos... pero no se dan cuenta que la vista objetiva de un tercero sobre un problema puede ser crucial para la resolución del mismo.

Siempre fui muy observadora de la gente, y luego de oír esa frase, presté aún más atención... y los diálogos que he oído me dan pena y vergüenza ajena.

Distinto es cuando dos personas se conocen mucho, que pueden hablar de los problemas mezclando porque se parecen, me ha pasado. Y descubriendo en el otro la solución que le cabe a a mi problema y viceversa. Da resultado, pero solo si uno no se encierra en sus problemas, y escucha los problemas que el otro le está contando. Eso causalmente pasa mucho cuando dos amigos están mal y se juntan a hablar para darse apoyo moral mutuo. Si sabré de eso...

En fin, es una buena convicción abrir las mentes y tratar de deslindarse de los problemas que nos aquejan, y aprender a escuchar al resto... aconsejar si se nos pide consejo, y no hacerse cargo de penas ajenas... prestar el hombro, si, pero no recargar nuestras mochilas de un peso innecesario.


Nos leemos en la próxima.



PD: Bienvenidos al nuevo orden monárquico de nuestro Blog. Enjoy it!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Claro que si, el simple de hecho de escuchar al otro ya permite que uno se pueda descargar... cosa que no todos hacemos cuando tenemos un problema y que lo necesitamos mucho.

En el diálogo está el enriquecimiento, además todos tenemos básicamente los mismos problemas... y nos caben las mismas soluciones, de una forma u otra.

En fin... besos Laly!